San Sebastián, 29 de septiembre.- El 55 Festival de Cine de San Sebastián, se despidió hoy con la ausencia de los galardonados como mejor actriz y mejor actor y con el reencuentro de dos amigos que llevaban siete años sin hablarse, el escritor Paul Auster y el realizador Wayne Wang, que recibió del primero la Concha de Oro.
La presencia de una Demi Moore con vestido blanco por encima de las rodillas puso el toque de "glamour" a la gala de clausura de esta edición, en la que han concursado dieciséis películas, la mayoría de las cuales ha logrado el beneplácito de la crítica.
Wang, que ha obtenido el máximo galardón del certamen con "Mil años de oración", recogió también la Concha de Plata al mejor actor para Henry O, el anciano protagonista de su película, que no ha podido desplazarse a San Sebastián por ser un viaje demasiado largo desde Estados Unidos para un "old man".
A Paul Auster, como presidente del jurado, le correspondía entregar la Concha de Oro a Wayne Wang, con el que participó en proyectos como "Smoke", pero cuya relación se rompió por desavenencias al preparar un trabajo.
Wang agradeció el galardón a todos aquellos que creyeron en esta pequeña película cuando era sólo un guión y al director del Festival, Mikel Olaciregui, por programar esta historia que tiene como protagonista a un hombre de 79 años, un proyecto en la antítesis de las "alfombras rojas".
Tras estas palabras, se fundió en un abrazo con Auster, signo quizá de la reconciliación, junto al cual abandonó el escenario.
La Concha de Plata a la mejor actriz para la española Blanca Portillo por su papel en "Siete mesas de billar francés" la agradeció la directora española del filme, Gracia Querejeta.
Una incógnita hasta el final fue si Nick Broomfield recogería su Concha de Plata al mejor director por "Battle for Haditha". Al final llegó a tiempo y quizá lo celebre con una buena cena, teniendo en cuenta que considera San Sebastián como un paraíso gastronómico, como aseguró sobre el escenario del Kursaal.
La más aplaudida fue la joven directora iraní Hana Makhmalbaf, que con tan sólo 19 años se lleva el Premio Especial del Jurado por "Buda explotó por vergüenza", quien dedicó la distinción a su padre, también cineasta, el primero en poner una cámara en sus manos.
Los miembros del jurado fueron los encargados de entregar los diferentes premios, al que se sumó el de mejor fotografía a Charlie Lam por "Exodus" y que recogió una representante de la distribuidora del filme.
Tras la gala se proyectó "Flawless", de Michael Radford, que presentaron su director, el actor Lambert Wilson y Demi Moore, la cual intervino, casi obligada por el realizador, y dijo únicamente que San Sebastián es una ciudad espectacular.
Entre el público, Liv Ullmann, Premio Donostia de este año. Richard Gere, el otro galardonado con este reconocimiento del Zinemaldia, se fue ya el pasado lunes.
Via elfinanciero
Concluye el Festival de San Sebastián
domingo, 30 de septiembre de 2007 Publicado por Shujel en 11:15 | Etiquetas: Noticias, Peliculas
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario