Lindsay Lohan vuelve a beber

Poco le ha durado a Lindsay Lohan su propósito de volver a hacer una vida normal y dejar atrás sus problemas con el alcohol y las sustancias. Se alejó de las malas compañías, Paris Hilton, Britney Spears, pero parece que éste no era el verdadero problema, ya que el pasado fin de semana volvía a ser pillada, con varias copas de más, tras una fiesta con su amiga Samantha Ronson (una conocida DJ británica), que parece que tampoco la lleva por el buen camino.

Según explican las fuentes que se encontraban en el mismo local que la actriz, la joven no perdió el tiempo y estuvo tomando cócteles de vodka mezclados con una conocida bebida energética durante toda la noche. Según 'The Sun', en una información recogida por otr/press, Lohan estuvo todo el rato junto a Ronson, que pinchaba la música del local en el que estaban, mientras hablaba con amigos y fumaba un cigarro tras otro.

Pero fue cuando su amiga puso la canción 'Gimme more' de Britney Spears cuando los clientes del local pudieron comprobar el estado de la protagonista de 'Chicas malas', ya que comenzó a bailar de una manera que evidenciaba su estado de embriaguez. Dicen los allí presentes a la revista 'People' que poco más duró la actriz, quien tras bailar un rato más se sentó para enviar a Ronson un mensaje de texto y luego se fue para su casa.

En los medios estadounidenses se especula con una relación sentimental entre ambas amigas, ya que en los últimos tiempos no se separan y Lohan viaja siempre a donde la DJ tiene compromisos laborales. Incluso algunas publicaciones, tras unas imágenes en las que ambas se mostraban muy cariñosas en unas vacaciones juntas, señalan que se han casado en Las Vegas el pasado mes de marzo.

ANTECEDENTES

Esta polémica no es nueva para Lohan, que ya conoce la experiencia de pasar por centros de desintoxicación, últimamente abarrotados de 'celebrities'. Hasta tres veces ha pasado la actriz por este tipo de centros, sin éxito a la vista de su aireada vida, difundida incesantemente por los medios de comunicación.

De momento la buena voluntad de Lohan sólo ha quedado en meras intenciones. Y eso que la que fuese niña prodigio ha expresado en más de una ocasión sus propósitos de cambiar de vida, hasta tal punto que aspira a convertirse en embajada de UNICEF para la infancia, en un intento por seguir el ejemplo de otros famosos, no en el ámbito de las adicciones, sino en el campo humanitario.

Via terra.es