El director Ingmar Bergman murió hoy

Ingmar Bergman, director sueco considerado uno de los mejores artistas del cine moderno, falleció el lunes, dijo la presidenta de la fundación del realizador. Tenía 89 años.
Reacciones de Londres, París y Copenhague, donde un seguidor de Bergman, el director Bille August, lo comparó con Akira Kurosawa y Federico Fellini, subrayaron su influencia internacional.
"El mundo ha perdido a uno de sus más grandes cineastas. El nos enseñó tanto a lo largo de su vida'', dijo el actor y director británico Richard Attenborough.
Astrid Soderbergh Widding, presidenta de la Fundación Ingmar Bergman, confirmó el deceso y la periodista sueca Marie Nyrerod dijo que el director murió tranquilamente mientras dormía.
Tras someterse a una cirugía de la cadera en octubre del año pasado, Bergman no llegó a recuperarse del todo, dijo a la televisora local SVT.
"Desde entonces... se aseguraron de que estuviera acompañado las 24 horas del día para ayudarlo a pararse con una cadera rota'', indicó Nyrerod, quien lo entrevistó en muchas oportunidades y que dijo haber hablado con Bergman recientemente "dos o tres veces por semana''.
Bergman murió en su casa de la pequeña isla báltica de Faro, al norte del centro turístico de Gotlandia, Suecia, dijo la agencia de noticias sueca TT, que citó a Eva Bergman, una de sus nueve hijos. No se informó de inmediato la causa de muerte.
Bergman, cuyo filme de 1982 "Fanny y Alexander'' ganó el Oscar a la mejor película extranjera, realizó unas 60 películas antes de retirarse en el 2003.
En sus cintas, Bergman presentaba su visión del carácter extremo de su amada Suecia: La depresión claustrofóbica de sus eternas noches invernales, la gentil felicidad de las tardes de verano y la oscura majestuosidad de la isla donde pasó sus últimos días.
"Fue uno de los grandes maestros y uno de los grandes humanistas del cine. Hay muy pocas personas de ese nivel en la actualidad. El demostró que el cine podría ser una forma de arte'', dijo Nick James, director de la revista Sight & Sound, del Instituto de Cine de Gran Bretaña.
"El fallecimiento de Bergman ocurre en una época en la que el cine es considerado más como un entretenimiento que como una forma de arte'', dijo James el lunes. "Sería bueno que hubiese más cineastas con este nivel de ambición artística''.
Bergman abordó temas difíciles como la plaga y la locura con una técnica innovadora y guiones inmaculados, convirtiéndose en una de las principales figuras del cine.
Fue "quizás el más grande artista del cine, tomando en cuenta todo, desde la invención de la cámara cinematográfica'', dijo Woody Allen en un reconocimiento con motivo de sus 70 años en 1998.
Bergman se dio a conocer en 1955 con "Sonrisas de una noche de verano'', una comedia romántica que inspiró el reciente musical "A Little Night Music'', de Stephen Sondheim. Su última película fue "Sarabanda'', hecha para la televisión y presentada en un canal público sueco en diciembre del 2003.
Cuando fue transmitida, casi un millón de suecos, uno de cada nueve habitantes del país, siguió el drama, basado en dos de los personajes principales de su previa serie de televisión, "Escenas de un matrimonio'', estelarizada por dos de sus actores favoritos: Liv Ullmann y Erland Josephson. "Escenas...'' fue luego editada y presentada como una cinta en 1974.
Sin embargo, fue "El séptimo sello'', de 1957, la que conmocionó tanto a los críticos como a los cinéfilos. Una alegoría de la muerte negra en el medioevo, el filme incluye una de las escenas más conocidas del cine: Un caballero jugando ajedrez con la figura amortajada de la muerte.
"Le tenía un terrible miedo a la muerte'', dijo Bergman durante el rodaje de la cinta, nominada al Oscar en la categoría de mejor película, que define la esencia de su obra: un tono profundamente serio, con destellos de humor inesperado e imágenes impactantes.
En una entrevista en el 2004 con la televisora sueca SVT, el poco sociable cineasta dijo que no le gustaba ver sus producciones.
"No suelo ver mis películas. Me pongo muy nervioso y a punto de llorar... y me siento muy mal. Creo que es algo horrible'', dijo Bergman.
Aunque se le conoce más por sus filmes, Bergman también fue un reconocido director de teatro. Trabajó en varias compañías suecas desde mediados de la década de 1940, entre ellas el Real Teatro Dramático de Estocolmo, que encabezó de 1963 a 1966. Y montó varias obras del autor sueco August Strindberg, a quien calificó como una inspiración.
Aún no se ha fijado la fecha de su entierro, pero según TT asistirán al mismo un grupo de familiares y amigos cercanos.

Via ElComercio