Ya eran muchos los meses que llevaba esperando Britney Spears para que su cuerpo volviese a su estado de antaño. Y, como no, gracias a un régimen estricto, a algún que otro esfuerzo, a su entrenador personal, y, sobre todo, a la cirugía estética, la cantante por fin ha conseguido quitarse de encima esos kilitos que tanto le incordiaban.
Teniendo en cuenta la ajetreada vida de la estadounidense, no era difícil de imaginar que a la cantante le haya resultado siempre algo más que complicado mantenerse en forma. Desde que la Princesa del Pop se casó imprevisiblemente y, con alguna que otra copa de más, en Las Vegas, el 3 de enero de 2004, Spears no se ha estado quietecita un segundo.
Tan sólo nueve meses más tarde de su inacertado y fallido primer matrimonio con Jason Allen Alexander, Britney decidió casarse de nuevo con el bailarín y cantante Kevin Federline, en Los Angeles, el 18 de septiembre del mismo año. La cantante y el rapero tuvieron dos hijos: Sean Preston, en septiembre de 2005, y Jayden James, en septiembre de 2006. Dos meses después de tener a su segundo retoño, la pareja de artistas ya se estaba divorciando.
Es cierto que el tener hijos implica, naturalmente, engordar. Y si a eso le añadimos problemas sentimentales permanentes y, como consecuencia, inestabilidad emocional, adelgazar no debe ser fácil. La estrella 'torbellino' se vió sumergida en una crisis psicológica que poco a poco se había transformado en una espiral sin salida, perdiendo así el control de su vida.
Debido a tanto cambio repentino, comenzaron las salidas nocturnas de la estrella, su descuido en lo que a su apariencia física respecta, su relación con el mundo de las drogas, sus continuos ingresos en clínicas de desintoxicación, y no sólo la posterior pérdida de la custodia de sus hijos, sino también la suya propia, que pasó a manos de su padre, Jamie Spears.
Pero por fin parece que Britney ha optado por preocuparse de ella misma. La cantante ha decidido reencauzar su vida empezando por sentirse bien con su propio cuerpo, y no ha escatimado en la manera de hacerlo. La 'princesita' ha invertido 246.925 euros en su cuerpecito para no tener complejos este verano en la playa.
Una pequeña operación de vientre de 3.175 euros por aquí, otra de cirugía de pecho de 5.644 euros por allá, algún 'peeling', un entrenador personal que cobra 4.233 euros al mes, además de su estricto régimen draconiano: verduras, frutas frescas, pollo hervido y adiós a los dulces. La suma de 'caprichos adegazantes' de la cantante sin duda es larga, ¡menos mal que los resultados son visibles!
Una fuente ha revelado al diario 'National Enquirer': "Britney estaba obsesionada con el deseo de parecer de nuevo una bomba. Después de dos niños, ha tenido que hacer verdaderos esfuerzos. ¡Y lo ha hecho, y le ha costado 246.925 euros!".
Via abc.es
Britney Spears y su dieta de 250.000 euros
sábado, 6 de junio de 2009 Publicado por Shujel en 11:23 | Etiquetas: Britney Spears
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